Rancias

Estamos asistiendo a un continuo ondear de banderas, rancias banderas olvidadas en baúles conservadas en alcanfor que al ondearlas esparcen su hedor.

Toda nuestra caverna se escandaliza, todo el pos-franquismo más rancio se siente herido en su honor por un gang más o menos desafortunado de un cómico.

Los conservadores, euroescepticos británicos ensalzaron los valores patrios en la defensa del Brexit, se sentían heridos y amenazados por el resto de ciudadanos europeos, por los emigrantes, querían mantener sus banderas, sus monedas, sus símbolos sin importarles sus ciudadanos tal y como ahora se pone de manifiesto y sacaron a ondear la Union Jack sin pudor.

Estamos ya hartos del American First del Trump y su cruzada contra los emigrantes, del Brasil primero de Bolsonaro del aquí no hay sitio para todos de Casado, frenos para el desarrollo sostenible que condenan a millones de personas a la falta de los recursos más elementales, a la marginalidad y la exclusión y siempre, siempre envueltos en una rancia bandera.

Asistimos a la revuelta de los chalecos amarillos en Francia que pone de manifiesto que no se puede gobernar a espaldas de millones de trabajadores.

Finalmente, la Estelada tampoco ha sido capaz de tapar las vergüenzas del gobierno conservador de Cataluña, del campeón de los recortes.

Entre 2011 y 2013 los gobiernos conservadores de la Generalitat recortaron el 20% de los gastos sociales, en junio de 2011 los manifestantes cercaron el Parlament ante la inminente aprobación de los presupuestos más regresivos de la democracia, miles de trabajadores se manifestaron contra los presupuestos de 2012.

Han tenido que pasar 6 años para que los trabajadores hayan dicho Basta!!! la reversión de recortes no puede esperar, el crecimiento económico no puede demorarse más, hacen falta políticas activas de empleo que "saquen" del riesgo de exclusión social a miles de ciudadanos, para terminar con los "trabajadores pobres", para poner coto a la precariedad, hay que recuperar los niveles de gasto público en Sanidad, Educación, Servicios Sociales y Asistenciales y todo ello tiene que ser compatible con las ansias de libertad de Cataluña, No, la Estelada no es la excusa.