Madrid Central
- juanalberti

- 1 dic 2018
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Como no podia ser de otro manera, la ciudadanía de Madrid respetó las nuevas restricciones de tráfico en la zona denominada Madrid Central.
Y es que hay un sentimiento generalizado de que algo tenemos que hacer, de que esto no puede seguir así y por eso, disciplinadamente, las madrileñas y los madrileños dejaron de circular por el área restringida, con el sentimiento de que se está contribuyendo en "algo importante" para todos; la preservación del aire que respiramos.
La medida tiene muchos puntos oscuros, no goza del consenso necesario, ni siquiera de la mayoría del Pleno Municipal, no está claro de que contribuirá a reducir los niveles de contaminación globales de Madrid, no está claro ni previsto como afectará a los barrios colindantes, no tiene resuelta la movilidad y accesibilidad de la zona afectada, no forma parte de un nuevo Plan para implementar un nuevo modelo de movilidad, tiene mucho de improvisación.
Tampoco es una medida nítidamente progresista, se ha desempolvado un plan de los anteriores gobiernos conservadores, incluso Ana Botella contempló su puesta en marcha!!!
Otras áreas de Madrid tuvieron restricciones al tráfico, todo el área colindante con el Palacio y Teatro Real, se peatonizaron calles en el centro (Fuencarral, Arenal) y lo fueron por ayuntamientos regidos por conservadores, claro, no tuvieron la contestación que la medida actual, ningún adalid del neoliberalismo lo comparó con el muro de Berlín o el gueto de Varsovia como hacen ahora con Madrid Central, en muy pocos días estas críticas desmedidas y en algunos casos repugnantes, callarán y la "ciudad funcionará" con normalidad interiorizando la medida.
Seguramente se debió trabajar más, se debió improvisar menos, seguramente se debió debatir más, con más colectivos afectados, colectivos a favor y colectivos en contra, seguramente se debió buscar el consenso en el Pleno Municipal, la medida tiene un cierto sabor a precipitación, a buscar una "gran medida" que marque la legislatura municipal, medida que no tenía hasta ahora el Gobierno Municipal de Carmena, quizás esta sea la gran baza electoral.
Pese a todo ello, bienvenido Madrid Central, no cabe duda de que el futuro de las ciudades irá por ahí, ya va por ahí, por grandes áreas centrales con el trafico restringido, con áreas peatonales y con el fortalecimiento del transporte público, si queremos seguir viviendo tenemos que hacer una apuesta nítida por conservar (y mejorar) nuestros recursos naturales, también el aire que respiramos, todas las grandes capitales ya están adoptando medidas semejantes a Madrid Central.
Pese a la improvisación e indefinición de la medida, las ciudadanas y los ciudadanos de Madrid harán de Madrid Centro un gran éxito en muy pocos meses, Madrid necesita un aire respirable y entre todos lo vamos a conseguir.




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